Hablemos de autismo: Diagnóstico, experiencias y amor

Necesito hablarles de algo que para algunos puede sonar desconocido y para otros muy cotidiano, muchos de los que no viven ni ven el mundo desde esta hermosa condición le temen o lo relacionan con una enfermedad y un conjuntos de estigmas, que quienes al vivirlo día a día descubren que no son más que prejuicios y falta de información.

El concepto actual es TEA cuya sigla significa Trastorno de Espectro Autista, la cual muchos preferimos llamar “condición de espectro autista”, porque les digo siempre a los papás, no tenemos niños trastornados, tenemos niños que ven, viven, interactúan y sienten el mundo de una manera distinta, lo que es la expresión máxima y hermosa de la singularidad de cada pequeño en desarrollo.

Esa forma única de ver el mundo o esa forma particular de comunicarse son las cosas que hacen único a cada enano y no tiene nada de malo, al contrario, ¡es hermoso!.

Sonaré indiscreto pero necesito contarles la hermosa historia de uno de mis pequeños...

Conocí a Felipe y morí con su ternura porque llegó a su primera consulta disfrazado, es un niño dulce y en honor a la verdad es tan único como todos mis enanos. En su segunda consulta su mamá me contó que estaba en proceso diagnóstico por el temido TEA.

Cuando su mamá habló, sus ojitos se llenaron de lágrimas, no tenía pena, sabe que su hijo no tienen una enfermedad, pero su gran miedo es que el mundo pueda no estar preparado para él, les prometo que mis ojos también se mojaron y simplemente la abracé para expresarle que no están solos en esto, somos un equipo de personas que haremos todo lo posible por ser el mejor apoyo para Felipe y le dije lo que quiero compartir con ustedes...

Primero debemos recordar que nuestra misión como adultos es apoyar a los pequeños entendiendo que son seres en desarrollo y que con todo nuestro amor debemos ofrecer las herramientas que necesitan para desenvolverse en el mundo... viéndolo desde la posición de terapeuta, creo que debemos recordar que los niños no son, ni serán, lo que nosotros queramos, por amor a veces pensamos que si tenemos todo bajo control, planificamos su vida y nos encargamos de que el mundo sea lo mejor posible podrán cumplir las expectativas y sueños que tenemos para ellos pero la realidad es que debemos acompañarlos y apoyarlos para que alcancen su máximo potencial. Que sean lo que quieran ser y que sepan que estaremos con ellos no para evitar sus caídas, si no, para ayudarlos a levantarse.

Les explico, hay niños que aprenden a andar en bicicleta solitos, y otros que necesitan rueditas de entrenamiento, apliquemos esta idea al desarrollo de nuestros pequeños, hay niños que no necesitan tanto apoyo pero hay otros que para explotar su máximo potencial debemos apoyar todos quien formamos parte del equipo que solo sueña con que sean grandes y felices.

El mundo no se va a adaptar de un momento a otro, les prometo que somos muchos intentando mejorar todo, pero lo que debemos hacer es dar herramientas a los niños para que se desarrollen en este duro y loco mundo.

Es hermoso ver cómo la preocupación de los padres nace desde un amor puro e inagotable, un amor que es capaz de hacer que desarrollen el súper poder de ser lo que sus hijos necesitan, ningún papá quiere ser el mejor del mundo, todos sueñan con ser el mejor del mundo para cada uno de sus hijos...

Esto es simple, debemos entender que esta condición se convierte en una más de las características que hacen especial a cada niño. Es como si te dijeran que tu hija tiene el pelo crespo y que debes desenredarle pelo, eso que la hace única también determina los cuidados únicos que debe tener, esta condición es de verdad hermosa cuando entendemos que solo es la definición de quien es cada pequeño.

Desde acá les mando un abrazo a todos los súper papás que han pasado por el proceso diagnóstico, a quienes lo están pasando, a quienes viven y a todos quienes entienden la condición, agradezco la confianza de la familia de mi pequeño amigo, les prometo que somos muchos intentando ser las mejores herramientas que ustedes pueden dar a sus hijos y que trabajamos para hacer este mundo más amigable con el mismo amor que ustedes día a día ven crecer a sus hijos.