El silencio de los poderosos

El silencio de los poderosos

31 Julio 2012

Hoy somos más respetuosos por campañas a miles de kilómetros de distancia, que de temas de gran injusticia social en nuestro propio interior.

Andrés Gillmore... >
authenticated user

A pesar de todo lo que hemos avanzado en materia de derechos ciudadanos, aun no nos hemos destrabado de todas las ataduras que hemos heredado del modelo que nos ha dominado por más de veinte años. Aun nos cuesta tener la capacidad de ver el país como un todo y entender que no todo pasa por Santiago. Los medios de comunicación hoy en poder de una poderosa minoría, tienen encapsulados y maniatados a la opinión publica, con temas que no coinciden con la realidad verdadera, Existiendo problemas de gran trascendencia de hechos en pleno desarrollo, que son obviados por los medios, porque no van en comunión con los intereses de los que dominan el país.  Hoy somos más respetuosos por campañas a miles de kilómetros de distancia, que de temas de gran injusticia social en nuestro propio interior. No damos la cara por ello y creemos que toda pasa por el tema de la educación, si legalizamos o no la marihuana, si encontramos otro escándalo en la iglesia, o quien será el próximo candidato a Pdte, de un mundo político que ya no representa a nadie y que lucha desesperadamente para no perder sus regalías.

Bajo nuestra realidad deberíamos estar más preocupados entre otros temas por la ley de pesca que pretende imponer el gobierno, que de salvar al oso polar en la Antártida a modo de ejemplo, que sin duda es importante el oso, pero más aun lo es la vida de miles de pescadores artesanales que quedaran en la indefeccion más absoluta, en caso de concretarse la intención del gobierno con el nuevo marco de ley que pretende imponer cueste lo que cueste.

Muchas de las organizaciones que podrían marcar esa diferencia ONGs y demases a fines, callan alevosamente ante la intención del gobierno con la pretendida ley de Pesca, al parecer por miedo a perder la esperanza de intereses que podrían venir, a no caer mal y ser tachados de complicados perdiendo futuras postulaciones a proyectos, cayendo en el lo que se denomina en sociología el egoísmo organizativo, que es la cara fea del mundo ciudadano. Que sacrifica todo mientras no toque la propia lucha y no ponga en tela de juicio la financiación de esa lucha. Es lo que reconocemos como los funcionarios de las luchas ciudadanas, que van solo por la justificación económica, si se gana mejor, pero no es lo importante. Lo importante son los $ y nada más. Si la masa se mueve marchan y se llenan la boca y la conciencia del ímpetu colectivo. Pero si deben obrar por conciencia propia, sin cámaras y sin financiamiento, solo por el hecho de entrar en batalla por esa verdad, dudan y se esconden esperando que otro tome la iniciativa. Si nadie la toma, entonces piensan que no es importante y sienten que lo hicieron bien, dejan que pase y se olvidan del asunto.

Don José Díaz Asencio, pescador provero de Puerto Gaviota entro en huelga de hambre en la región de Aysén hace ya 18 días, pocos fuera de Aysén lo saben. Tomo esa decisión por una necesidad personal de hacer algo. De no esperar a que otros lo hiciesen por el, destruido por la pretendida nueva ley de pesca y de la forma en como el gobierno pretende imponerla, por lo que el considera una ley inadecuada y vergonzosa, que no lo toma en cuenta como trabajador chileno que es. Sin ningún derecho a voz, ante un gobierno sin sentido común que no tiene la capacidad de escucharlo. Cuando el solo bajo la premisa del conocimiento de su actividad, pide que se respeten sus derechos mínimos de trabajador del mar.

Muchas de las organizaciones internacionales que piden ayuda por causas de toda índole con un gran financiamiento internacional por un Chile más ecológico y sustentable, hacen caso omiso de su realidad y de la destrucción de los derechos humanos de todos los pescadores artesanales de Chile y el derecho a trabajar en un mar que es de el y de todos los chilenos. Hoy estos hombres de mar están representados por este simple pescador provero de Puerto Gaviota al norte de Aysén, que entrega lo único que posee y domina a cabalidad por su verdad, su vida, su cuerpo, su salud y su conciencia, poniéndolo a disposición por un mundo mejor. Ese es Don José un hombre que hoy en su lucha representa a todos los ayseninos y chilenos que creemos en un Chile sustentable, más humano para todos y no solo para algunos.

Ningún canal de TV abierta ha hablado de la lucha de este hombre de mar a pesar de haber sido noticia en canales extranjeros, que si han reconocido su verdad. Incluso el director de Green Peace Chile al ser consultado por su silencio via twitter ante una ley que permite la pesca de arrastre totalmente anti ecológica, respondió que no era un opinologo, en una posición que te hace reflexionar si de verdad hemos aprendido algo en este año y medio de luchas ciudadanas.

Lo que pide simplemente este pescador artesanal, es que se abran los registros pesqueros a las embarcaciones artesanales. Que los propios pescadores artesanales puedan inscribir sus embarcaciones, que ellos mismos puedan desembarcar sus productos y comercializarlos, sin tener que por obligación venderle a las consultoras determinadas a dedo por el gobierno, creando un monopolio de voluntades políticas. Que se cambie el fraccionamiento de la cuota y que se les otorgue a ellos los obreros del mar, las cinco millas náuticas de protección que se merecen y que necesitan para realizar su actividad, sin tener que disputarse el mar entre ellos mismos y poder así sobrevivir dignamente. Que se analice región por región y no que se uniformice a todos por igual, cuando las realidades son tan distintas.

Don José un hombre con años de mar, entiende que el sistema que pretende imponer el gobierno al otorgarles a las consultoras el monopolio de la comercialización, no es el fundamento adecuado para lograr un desarrollo con equidad y sustentabilidad, de una ley que demuestra falencias importantes, no ser justa para todos y ser viable solo para los grandes industriales en detrimento de los artesanales, que sobreviven del mar por generaciones desde mucho antes que los industriales. Como pescadores autónomos replica don José, deberíamos poder gestionar la propia venta de nuestros productos a quien estimemos conveniente, de un derecho amparado por la constitución de un país libre y soberano, en un fundamento en el cual hemos basado nuestro desarrollo económico de libertad de mercado, que al suponer la creación de un monopolio de compra, atentaría contra la actividad y el buen manejo de la actividad.

Hoy más que nuca debemos tener claridad en los fundamentos en los cuales nos proyectamos con leyes marco que destruirán la vida de miles de personas y no tener partida de caballo ingles para luego no conseguir nada. Tenemos que tener la capacidad de entender que si el otro no esta bien entonces nosotros no estamos bien. Como aysenino me apego a esa frase que por un momento nos guio y nos hizo ser respetados en Chile y el mundo. TU PROBLEMA ES MI PROBLEMA.