Gritos, piedrazos, balas de fogueo e insultos marcaron la tensos momentos se vivieron esta mañana en el puerto de Iquique.

Una actividad programada por la Empresa Portuaria de Iquique estaba destinada a entregar las obras de remodelación de los sitios 1 y 2 del terminal, dañados con los terremotos de abril 2014.

Al llegar las autoridades, no obstante, un grupo de cerca de veinte personas comenzó a agredir verbalmente a los presentes. Ya arriba de un bote para trasladarse, la embarcación fue atacada con piedras por parte de los manifestantes.

Esta acción motivó la presencia de Carabineros y Fuerzas Especiales con el fin de evitar incidentes mayores y resguardar la visita de la intendenta Claudia Rojas, quien debió ser trasladada en una lancha hasta el sitio. El clima hostil incluso canceló la llegada de un crucero que era parte de la jornada, como medida preventiva ante los disturbios.

En esta línea, recién cerca de la 2 de la tarde la comitiva que participó de la actividad pudo retornar a tierra bajo la atenta mirada de las fuerzas policiales que debieron instalarse en la zona norte de Iquique.