Sanar es parte de un equilibrio: Mente, cuerpo, espíritu y medioambiente

La sanación con manos, las terapias energéticas y las tradiciones de pueblos originarios han sido utilizadas por todas las culturas durante milenios. Las civilizaciones antiguas, incluyendo Egipto, Babilonia, Asiria, Fenicia, India, Irán, Grecia y Roma, desarrollaron escuelas de sanación que aportaron sabias tradiciones para el aprendizaje e iniciación de los sanadores, con evidencias del ejercicio de la sanación energética en la medicina tradicional China y en los jeroglíficos egipcios. Hipócrates, el padre de la Medicina Occidental, tomó algo que fluía de las manos.  Los chakras y el sistema energético de la cultura India, así como también el equilibrio oriental del yin y yang, reflejan estos antiguos principios energéticos.

Como profesional de salud y de RRHH , sumado a mi vocación como Terapeuta de Medicina Complementaria en la especialidad de  Sanación Bioenergética del Centro de Sanación Natural Bioenergética KAMAK (ONG), después de haber incursionado en diversas técnicas de sanación como biomagnetismo, reiki por nombrar algunas, me encanté con el Método Healing Touch, porque se fundamenta en prácticas milenarias y ancestrales estandarizadas en procedimientos y código ético,  asimilado al estándar de prácticas de enfermería en EE.UU.      Este método son un conjunto de técnicas no invasivas que se aplican a través de una terapia de biocampo (energía), puede ser realizada de forma presencial o a distancia, limpian, energizan y balancean los campos energéticos humanos y ambientales, con el fin de mejorar el estado de salud del paciente de enfermedades físicas y emocionales.   Healing Touch se aplica en EE.UU. y otros países principalmente en Hospitales, Centros de Salud y es enseñada en Universidades para Escuelas de Medicina y Enfermería. En nuestro país, en el año 2012 se fundó Prosh Chile (en Iquique) con la finalidad de promover la formación de este método, la Fundación Prosh está acreditada por Healing Beyond Borders para América Latina y actualmente es escuela de formadores de Terapeutas.

INTERCAMBIO ENERGÉTICO

La idea de toda la vida se sostiene por una “Energía de Vida Universal” que ha existido a lo largo de la historia de la humanidad y aún continua.  La historia nos muestra que cada cultura y en cada tradición médica ancestral la sanación se efectuaba mediante el movimiento de la energía.

Las teorías de la física cuántica dicen que la realidad, tal como la conocemos, está conformada íntegramente de energía en sus variadas formas, los campos energéticos vibrando en diferentes frecuencias, estas alteraciones en la frecuencia permiten que algunas energías sean visibles y tangibles como en el caso de la materia, y otras invisibles pero conocidas como la gravedad y el espectro electromagnético.

Durante el transcurso de la historia, la humanidad ha tenido la visión de un mundo integrado en el cual la comunicación ocurre entre los humanos y sus alrededores, con una fuerza de vida que permea y conecta al humano con su medio ambiente. El balance o desequilibrio de este intercambio energético era el indicador de la dolencia o enfermedad, como también la fuente de la salud y bienestar. Esta energía ha sido descrita de manera semejante con características y funciones similares a través de las culturas y a lo largo del tiempo, trayendo consigo vitalidad, sanación despertar y transformación.

EL PROCESO DE SANACIÓN

La sanación permite a la persona enferma reintegrarse y recuperar el equilibrio entre mente, cuerpo, espíritu y medioambiente, concluimos que la sanación es multidimensional, va más allá de la curación.

Estudios han depurado conceptos de medicina energética y terapias del biocampo, basados en seis pilares, estos se describirán a lo largo de las publicaciones.  Como introducción a estos pilares se incluye: El ámbito o alcance de la medicina energética; la eficiencia de la terapia; su sentido práctico; el apoyo y empoderamiento de los pacientes a través de las terapias del biocampo; el alineamiento de estas terapias con la física cuántica; y la orientación holística de las terapias y filosofía.

En un modelo de cuidados holísticos, el rol principal del Terapeuta es proporcionar una conexión sanadora que permita al paciente reconectarse con su propio ser, el enfoque está en comprender los patrones de conexión y desconexión.  Cuando esto se logra internamente, se obtiene un estado con una perspectiva mental equilibrada de “Mindfulness” (estar presente). Este ultimo concepto Mindfulness está muy utilizado en grandes organizaciones como prácticas de calidad de vida para sus colaboradores, en áreas de RR.HH.

¿QUE SABEMOS DEL BIENESTAR Y AUTOCUIDADO?

El bienestar depende del autocuidado y el autocuidado se define como la aplicación de las actividades intencionadas en la restauración del balance en nuestras vidas.  La intención o estado de la mente detrás del autocuidado, está orientada a mejorar y nutrir la autoconsciencia.  La falta de autocuidado puede llevar a un sentimiento de disminución, lo que ocasiona agotamiento, fatiga de compasión, estrés y disfuncionalidad.  No podemos dejar de mencionar como nos hemos visto afectados por el confinamiento y estrés en tiempos de pandemia, donde se han visto alterados aspectos psicosociales y mentales en forma transversal.

Para concluir solo reconocer en estos meses las actividades relacionadas con el método Healing Touch como un valioso aporte, en tiempos de Covid19, los Terapeutas han podido realizar sus prácticas a distancia fortaleciéndose como Redes de Apoyo.   Los grupos de Terapeutas y sus actividades de Voluntariados en Iquique y otras regiones se han orientado a atender casos críticos en momentos en que se ha tenido acceso limitados por la alta demanda en las redes de salud.   Como consecuencia del confinamiento se han aumentado las atenciones por temas como crisis de pánico, angustia, estrés, depresión, trastornos del sueño entre otros y se ha fortalecido el apoyo a consultas relacionadas con diferentes tipos de dolor (espalda, cabeza, fibromialgia), tratamientos de quimioterapias, traumatológicos por mencionar algunos. La labor es permanente ya que el nivel de necesidad a aumentado y principalmente en los grupos más vulnerables, en tiempos de crisis sanitaria.