S.O.S Tarapacá en peligro: Antecedentes históricos de amenazas en la Región de Tarapacá

13 Septiembre 2021
Los antecedentes históricos se remontan al año 1600, sin embargo, los eventos climáticos extremos han aumentado en frecuencia e intensidad afectando al sistema regional y sus comunidades.
Héctor Derpich ... >
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Terremotos, tsunamis, aluviones y lluvias han afectado a la región de Tarapacá.

La relación de la región con eventos físicos extremos no es nueva, los antecedentes históricos se remontan a varios siglos atrás. Los registros indican que la región ha sido impactada por sismos de gran intensidad, el terremoto de 1868 fue devastador con una estimación de 8,5 grados Richter y el tsunami posterior al sismo destruyó los edificios principales del puerto, las máquinas condensadoras de agua, los almacenes de salitre y el muelle. Durante 1877 se produjo otro sismo estimado en 8.7 grados, que causó daños materiales y humanos, se informó de 5 personas muertas y de una destrucción parcial, aunque importante de la ciudad. El tsunami arribó a las costas de Arica una hora después del terremoto con olas de 20 metros.

En 2001 un sismo de 8,5 grados generó un tsunami que arribó sólo a algunas localidades de la costa peruana. En Arica resultaron 500 personas afectadas, 20 damnificadas, 5 heridas, 159 casas destruidas, 240 con daño mayor, corte de caminos y daños en la estructura vial y portuaria cuyo monto de reparación ascendió a los 397 millones de pesos según ONEMI. En Junio de 2005 se produjo un sismo con epicentro cerca de la frontera con Bolivia (7,9 grados).

El movimiento telúrico causó la muerte de 11 personas y 6.018 personas damnificadas, principalmente en las localidades rurales de Iquique. Afectación infraestructura eléctrica y sanitaria, cortes caminos (ONEMI 2005). Recientemente en el 01 de abril de 2014 un terremoto de 8,2 grados resultó con 6 personas que perdieron la vida; 21.813 personas damnificadas; 8.281 viviendas dañadas de las cuales la mayor cantidad son de Iquique y Alto Hospicio. El puerto de Iquique resultó con graves daños en los sitios 1 y 2; afectación conectividad Ruta A-16; Afectación infraestructura eléctrica y sanitaria; cortes de caminos costeros y rurales (ONEMI 2014).   

Eventos meteorológicos históricos

Los 20 milímetros (mm) caídos entre el miércoles 24 y jueves 25 de julio de 1940, constituyen la mayor precipitación de agua ocurrida en el siglo XX en la zona. Los registros dan cuenta de los 15 mm que precipitaron en 1903 y los 16,2 mm de lluvia caída en 1957. Otro fenómeno inusual ocurrió también el año 1957 cuando precipitaron en menos de 24 horas unos 9 mm.

Antes del desastre, entre los días 12 y 13 de junio del 1940, se produjo un evento meteorológico que causó algunos daños en la ciudad y generó un aluvión que no generó alarma en la población. Sin embargo, el aluvión del 25 de julio produjo la interrupción completa de la ciudad de Iquique, paralización total del tráfico ferroviario (fiscal y salitrero) y corte de la carretera que une Iquique y Alto Hospicio, abriendo zanjas que alcanzaron hasta los 5 metros de profundidad y que actualmente son observables a simple vista desde la ciudad.

El suministro de alumbrado fue suspendido por la autoridad ante la ocurrencia de incendios ya que las techumbres de las casas que estaban cubiertas de conchuelas siguieron filtrando y goteando el agua acumulada a pesar del término del aguacero. El aislamiento sufrido entre Iquique y Alto Hospicio fue solucionado en unos cinco días, mientras se generó la puesta en marcha del primer puente aéreo de la historia aeronáutica chilena, cuando uno de los aviones Junker JU 86K de la base aérea Los Cóndores despega trasladando personas y correspondencia, realizando unos 20 viajes entre la base aérea y la pista de la Línea Aérea Nacional.

Más al Norte, una parte importante del poblado de Pisagua fue destruido debido a que la lluvia provocó dos grandes lagunas en la zona alta de la ciudad, que a eso de las 10 am desbordaron arrastrando piedras y barro, provocando el anegamiento de casas y de los estanques de agua potable con unos 60 centímetros de lodo.

En Tocopilla la situación fue catastrófica, en total unas 50 personas fallecieron en esta ciudad, en Gatico y en las minas La Despreciada y La Toldo.

Recientemente, el evento meteorológico que afectó a la región en febrero de 2019, causó daños en los componentes del sistema urbano afectando a miles de personas. Las ciudades de Iquique y Alto Hospicio recibieron fuertes precipitaciones que alcanzaron los 12,5 milímetros de agua caída en 2 horas, las que generaron un superávit del 1.250 % de lluvias para la región, provocando una seria interrupción en el funcionamiento de la conurbación Iquique – Alto Hospicio que logró afectar a miles de personas y a todo el sistema regional. 

La gestión del riesgo de desastres en Tarapacá

La vulnerabilidad de nuestro sistema regional requiere que el Estado y sus autoridades territoriales adopten medidas específicas, en primer término para lograr comprender la anatomía de los eventos climáticos que nos están afectando y así entender las características de los peligros para las personas; en segundo lugar enfrentar las vulnerabilidades que afectarán a nuestras comunidades tanto urbanas como en el Tamarugal, incluida la exposición de la infraestructura crítica situada en el borde costero; como tercer eje de acción, en el contexto de la descentralización se debe robustecer la gobernanza para gestionar institucionalmente de manera eficaz y rápida los riesgos que afectan a las personas; y finalmente se debe aumentar la preparación de las comunidades en los ámbitos de la recuperación, la rehabilitación y la reconstrucción.

Estos son algunos ejes sobre los que debemos discutir, generar diálogo y participación para lograr una efectiva reducción del riesgo de desastres sobre nuestro sistema regional y asegurar la sostenibilidad en el largo plazo de nuestras comunidades regionales.