¡Al abordaje!... más de un siglo después

21 Mayo 2013

El año 2012, los ciudadanos que más visitaron Perú, fueron los chilenos. En Chile, los peruanos. Hay una fuerte relación económica entre los países, lo que demuestra confianza y deseos de establecer relaciones de largo plazo.

José Tomás Vicuña >
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En el Combate Naval de Iquique hubo un enfrentamiento que dejó más de 200 muertos.  No supimos dialogar y la guerra derivó en múltiples combates y muertes, que a su vez trajeron rencores entre los ciudadanos de ambos países. Rencorque se ven fortalecidos con hechos como el ocurrido la semana pasada en Arica, donde más de 3 mil estudiantes desfilaron recordando a Arturo Prat. Esto refuerza una historia que divide.

Más de 130 años después del Combate Naval de Iquique, Chile y Perú tienen diferencias en algunas políticas de Estado, pero hoy somos capaces de dialogar con altura de miras. Las relaciones desde el 2006 han estado circundando en torno al diferendum marítimo en La Haya, pero no hemos caído en la guerra y diversos sectores se esmeran por promover una cultura de paz y reconciliación.

Es para celebrar que los “proyectiles” sean el diálogo jurídico y declaraciones conjuntas. Los presidentes de ambos países señalan que acatarán el fallo, se ha retomado el diálogo del “2+2” que reúne a los ministros de Relaciones Exteriores y Defensa de ambos países; instituciones gubernamentales y civiles de Arica y Tacna forman parte del Comité de Integración y Desarrollo Fronterizo; intelectuales, políticos y empresarios han formulado caminos de paz y bienestar entre ambos países.

El año 2012, los ciudadanos que más visitaron Perú, fueron los chilenos. En Chile, los peruanos. Hay una fuerte relación económica entre los países, lo que demuestra confianza y deseos de establecer relaciones de largo plazo. En Tacna, el Hospital de la Solidaridad, atiende miles de chilenos mensualmente. Por el paso fronterizo de Chacalluta ingresan a Chile, en promedio, 13.000 personas diarias, la gran mayoría peruanas. Los valles de Lluta y Azapa pueden entregar productos a la XV Región en gran parte por la mano de obra peruana que viene a trabajar. Nos necesitamos.

Pero las relaciones comerciales no bastan. Los encuentros comerciales generan ingresos; los encuentros humanos, justicia. El gran paso es generar una cultura de paz y reconciliación. Hechos como el desfile de alumnos ensalzando la figura de Prat, no ayudan. Hace casi más de un siglo, Arturo Prat gritó “al abordaje muchachos”. Saltó por su país, por el honor. Hoy, miles de peruanos saltan al abordaje por sus familias, su dignidad. La diferencia es que no lo hacen para aniquilar al enemigo, sino que para alimentar y cuidar a su familia. No olvidemos también a los casi de un millón de chilenos que saltan al abordaje en otros países en busca de mejores oportunidades. Migrar es inherente al ser humano.

Nos encontramos fácilmente con una cultura que pretende fomentar la rivalidad y discriminación. Ciudadano Global, Servicio Jesuita a Migrantes y Refugiados; junto a muchas otras personas e instituciones, busca una cultura de acogida en Chile. Los países buscan profundizar en confianzas, pero no basta lo económico, sino que debe crecer lo espiritual, cultural y humano. Muchos saltan al abordaje por una vida mejor, pero hoy, quizás al igual que en el combate Naval de Iquique, no queremos que otros lleguen a “nuestro” lugar. ¿Quién dijo que este pedazo de tierra era mío? ¿Por qué nos asusta la diversidad? Que este 21 de mayo nos ayude a promover una cultura de acogida y no de rechazo, frente a quienes vienen a colaborarnos en nuestra región.