En tres horas se agotaron todas las entradas para Iquique - Católica

A las 10 de la mañana ya había hinchas de Deportes Iquique en el paseo Baquedano. Los fanáticos sabían que iba a ser una jornada larga y difícil. Difícil, quizás, tanto como el mismo partido ante la UC.

Soportando el calor y a pura fe los ilusionados iquiqueños esperaban en la incertidumbre. No había información clara respecto a una hora para la esperada venta, ya que faltaba un importante trámite.

Recién en la mañana la Gobernación Provincial de Iquique realizó la última visita inspectiva al estadio de Cavancha, buscando el último dedo para arriba que habiltará la renovada cancha para el duelo.

Por la tarde se cumplieron los procedimientos regulares y en el CDI tenían vía libre para iniciar el esperado proceso, destinado a vender poco más de 1.500 boletos.

Minutos antes de las 6 de la tarde la fila comenzó a avanzar y como por inercia aparecieron los siempre ingratos "colados", atendando contra los más fieles y su romería de diez horas por una entrada.

Veintiuna horas y el club lo hizo oficial: Todo agotado para el domingo. Así cayó la noche y el día quedó dividido entre un grupo de hinchas que criticaron la organización del proceso, y otros, pocos, que duermen con la entrada bajo la almohada y sueñan con celebrar que Iquique está a un paso de ser campeón.