La Fundación Superación de la Pobreza (FSP) reaccionó a los resultados de la Encuesta Casen 2011 dados a conocer por el Presidente Sebastián Piñera, manifestando que es una buena noticia para el país que entre 2009 y 2011, la pobreza medida por ingresos, haya revertido, aunque fuera levemente, el alza experimentada en 2009, bajando del 15,1% al 14,4%. En una dirección similar y más intensa, la indigencia retrocede del 3,7% al 2,8%. De acuerdo al Presidente de la Fundación, Rodrigo Jordan, esta situación ha contado con un telón de fondo bien auspicioso, tasas de crecimiento en el período cercanas al 6% promedio, aumento en las remuneraciones reales al 4% y caída del desempleo del 11%, a menos del 7%. “Todos los subsidios han sido actualizados, algunos inclusive sobre el IPC general, y se introdujeron nuevos aportes como la Asignación Social, y ahora el Ingreso Ético Familiar, que ha beneficiado a muchas personas”, señaló.

Asimismo, la FSP hace notar que el desempeño exhibido por el crecimiento económico y las políticas sociales para enfrentar esta pobreza por ingresos, aparentemente, ha sido menor que en otros momentos de la serie CASEN. En otras palabras, considerando el nivel de crecimiento y el vigor de políticas de subsidios monetarios, podría haberse esperado una disminución mayor de las cifras. Parte de la explicación de este inusual comportamiento, se desprende, de manera similar que en el trienio anterior, debido a la inflación de los alimentos (13,2% acumulado), la que fue mayor que el IPC general (6,5%  acumulado). Dado que el componente alimentario es muy importante en la Canasta de Satisfacción de Necesidades Básicas, ésta tendió a aumentar su valor por sobre lo esperado. Adicionalmente, estas cifras podrían estar, todavía, bajo la influencia de los efectos del terremoto/maremoto del 27 de febrero de 2010. Sin embargo,  todo lo anterior no es suficiente para explicar todo el comportamiento de la cifra, pudiendo existir razones más profundas ligadas al diseño y enfoque de las políticas sociales y económicas del país.

El Director Ejecutivo de la FSP, Leonardo Moreno, en tanto señalo que “no basta con medir la pobreza. El mayor desafío de Chile en materia de diseño e implementación de políticas sociales y económicas, de cara a las próximas décadas, es ESCUCHAR a los afectados, hacerlos partícipes de las decisiones que les atañen, integrar sus percepciones, apreciaciones y propuestas en el desarrollo de planes y programas”, señaló Moreno. Asimismo, agregó que para enfrentar este tipo de pobreza, no basta con hacer “más y/o mejor de lo mismo. Vivir en pobreza no es sólo “NO TENER”, también y, muchas veces prioritariamente, es un impedimento para SER, HACER o inclusive ESTAR en sociedad. Solo una nueva generación de políticas, con renovado enfoque y práctica, podrá atender y hacer frente a este desafío”.

Como ya es una constante desde 1998, la Fundación también manifestó, una vez más, su llamado a actualizar la línea de la pobreza, es decir, la estructura, bienes y factores que componen la Canasta de Satisfactores de Necesidades Básicas, que fue construida en base al patrón de consumo observado en la población del Gran Santiago en los años 1987-1988 (IV EPF). Desde esa fecha, se ha actualizado en varias ocasiones la Canasta de IPC, la Ficha CAS, las encuestas de empleo, la matriz insumo producto, etc; pero la CSNB es el único instrumento que no ha experimentado adecuaciones desde su origen, pese a las recomendaciones esgrimidas por diversos sectores, incluido por cierto el propio Congreso.