Responsabilidad Social Municipal: Queremos Candidatos Aptos y Conscientes

01 Julio 2008
Hoy día los alcaldes está estresados, otros cuestionados y algunos desaforados por órdenes judiciales y aún así insisten en postular tratando de convencer a su electorado. Por Hugo Pérez White
Hugo Pérez White >
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Se acorta la distancia para elegir a los alcaldes y concejales en todas las comunas del país y los candidatos ya empiezan a perfilarse, provocando airadas reacciones en el interior de los partidos políticos, donde las diversas sensibilidades quieren imponer sus ideas a través de los militantes que mejor los representen, provocándose en esta lucha de pasiones verdaderos fratricidios partidarios, los cuales, producen efectos negativos para una sana convivencia, que muchas veces se perpetúan en el tiempo, lo que hace muy mal a las buenas relaciones.
Pasó el tiempo y de nuevo surgió la ilusión de elegir y ser elegido mediante la votación universal.
Esta elección se concretó mediante listas conjuntas de candidatos que aspiraban todos a ser alcaldes y hacia esa meta fueron dirigidos todos los esfuerzos para convencer a la ciudadanía que eran los mejores para ejercer la primera magistratura comunal y como al final del proceso era uno solo el elegido para ocupar este sitial edilicio, los restantes quedaron como alcaldes frustrados y por ende pasaron a ser concejales, con el poder de ser fiscalizadores de los actos administrativos del jefe comunal, función que cumplieron a cabalidad, produciéndose en algunas comunas, fuertes discusiones que muchas veces terminaron en violencia verbal y golpes de mesa que hicieron subir la temperatura ambiente para deleite de los asistentes que frecuentemente asistían de espectadores a las sesiones.
Finalmente los ánimos se calmaron y se logró cambiar el sistema imperante y se propuso la elección de alcaldes separados de concejales cuyas más altas mayorías eran elegidos para sendos cargos y el resto se iba a casa lamentando su derrota y a prepararse para contiendas futuras, siempre convencidos que eran los mejores representantes del pueblo para ejercer los cargos en disputa.
Hoy día los alcaldes está estresados, otros cuestionados y algunos desaforados por órdenes judiciales y aún así insisten en postular tratando de convencer a su electorado que no pudieron cumplir sus promesas electorales por falta de recursos y trabas burocráticas que impidieron la realización de programas en beneficio de sus comunidades.
Por éstas y muchas otras causales, extraña que haya tanta ansiedad para optar a estos cargos, nada de atrayentes en el aspecto económico por lo cual sería conveniente, que antes de aceptar ser candidato a algún cargo en disputa, se informen primero de los deberes a cumplir si son electos, y a los problemas a que están expuestos si no cumplen las propuestas hechas a su comunidad.
Foto: KNO
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