Más de lo Mismo en el Movimiento Sindical Chileno

Más de lo Mismo en el Movimiento Sindical Chileno

18 Junio 2008
Mientras el movimiento sindical no logre articular demandas a nivel nacional, estamos condenados como ciudadanía a ser pasados a llevar una y otra vez por un Estado Empresarial. Por Mauricio Toro
Mauricio Toro >
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Nuevamente el gran empresariado (Luksic, Matte, Angelini, Piñera, Claro y Pullman) es el único favorecido tras un movimiento social de envergadura. ¿Cómo es esto? ¿De qué estoy hablando, si los camioneros, al igual que los subcontratistas del cobre hace un par de meses han logrado "grandes" avances para el movimiento de los trabajadores?. La respuesta es que no han logrado nada para el país, sino para sus propios intereses y de "pasadita" le han hecho un gran favor al gran empresariado -que tenía sus flamantes camiones bien "guardaditos" durante estos días- que aumentará aún más sus ganancias con esta rebaja, mientras a la vez incrementan la contaminación de CO2 en el medio ambiente. Recordemos que con o sin impuesto al diesel, los precios no bajarán, pues ya no lo hicieron con la primera reducción del impuesto a los combustibles; y más aún subieron, lo cual lo vemos en los pasajes de la locomoción colectiva a lo largo y ancho de todo nuestro país.
Expliquemos esto paso por paso y con antecedentes.
Año 2006, movimiento de los estudiantes secundarios
Tras la completa politización partidaria de sus dirigentes, el movimiento fracasa en el largo plazo, por la falta de claridad del concepto de educación que se estableció y por confiar en personeros del gobierno y sus mesas de diálogo y consejos asesores. Hoy, el hecho de que miles de estudiantes secundarios y universitarios estén movilizados contra la LGE es producto de aquellas malas decisiones dirigenciales.
Entre los años 2006-2007, dos grandes movilizaciones, los forestales y los subcontratistas del cobre
En el primer caso causó la muerte de Rodrigo Cisternas ¿Qué se logró? Pequeños ajustes de sueldo y bonificaciones para el sector y, a más de un año de su muerte por una bala certera en su cráneo por un funcionario de Carabineros de Chile, -dirigidos por el entonces “general del pueblo”, José Bernales-, nada nuevo aparece bajo el sol, los mismos empresarios, la misma explotación desalmada del suelo y los recursos naturales, la misma pobreza en la región de Arauco, la misma persecución y encarcelamiento de los comuneros mapuches en el wallmapu, etc. Lo curioso es que más de 5 dirigentes de estos forestales, figuran ya como candidatos a alcaldes y concejales por la más variada gama de partidos políticos, incluso de la derecha. Es cosa de investigar y salen a la luz los “trapitos al sol” del movimiento sindical chileno.
En el caso de los subcontratistas del cobre, en las últimas dos grandes movilizaciones, si bien lograron importantes ajustes para sus intereses particulares, nuevamente nada en nombre del país, ni siquiera de su región. Un dato no menor e increíble es conocer las cifras del consumo de camionetas 4x4 en el norte y, especialmente, el agotamiento del stock de los televisores plasmas a una semana del fin de la movilización en aquellos días, cuando se supo de la bonificación de término de conflicto de 8 millones de pesos, una completa vergüenza y evidencia de la poca claridad y visión de país de los dirigentes sindicales. ¿Qué no les diría don Clotario Blest si estuviera vivo no?
La guinda de la torta, los camioneros
Deponen su movilización una vez que se “arreglan sus bigotes” con el tema del impuesto al diesel; olvidándose completamente que más del 80% del país funciona con otros combustibles, pero la individualidad de las demandas es más fuerte que el espíritu de país ¿no? Que no les extrañe que más de algunos de sus dirigentes aparezca el día de mañana en su circunscripción electoral o alcaldía postulando a algún "carguito" por ahí. Sepan que es parte de ser dirigente sindical en estos días.
Todos estos antecedentes nos llevan a pensar lo siguiente; ¿Cuándo lograremos como país, que los grandes sectores sindicales se pongan de acuerdo en no solo movilizarse para arreglar sus problemas internos, sino para jugársela por el bien de Chile?. Imagínense que cada una de estas movilizaciones en el país (ya sea camioneros, forestales, mineros del cobre, estudiantes) pueden dejar parado un país y exigir a nombre de la ciudadanía la solución de los grandes problemas que vivimos diariamente producto de este modelo neoliberal, capitalista salvaje y sin piedad ni compasión por los sectores más desfavorecidos por el sistema, que sin llegar a las exageraciones de los medios de comunicación por el tema de Puente Alto, es una realidad que existe y que no sacamos nada con tapar con un dedo, pues es una tensión social que crece a pasos agigantados y se evidencia en las altas tasas de delincuencia y violencia escolar, especialmente en los liceos municipales.
Mientras el movimiento sindical no logre articular demandas a nivel nacional poniéndose a la altura de lo que representan, estamos condenados como ciudadanía a ser pasados a llevar una y otra vez por un Estado Empresarial que día a día avanza hacia un Estado Policial, paradójicamente impulsado por los mismos líderes que lucharon contra este modelo en la dictadura de Augusto Pinochet y juraron no volver a lo mismo en los albores de los noventa en un Estadio Nacional lleno; hoy en día, aquellos dichos de Aylwin, no son nada más que “palabras al viento”, tras las muertes de 6 mártires en defensa de los derechos ciudadanos, y muchos tantos condenados y presos por expresar el derecho a participar de un país que excluye la participación ciudadana de manera sistemática y bajo un modelo asistencialista y clientelista de Estado que nos está llevando a la desaparición ciudadana, dejándonos como meros consumidores pasivos en un modelo excluyente de Estado.
Finalmente, si los lideres sindicales, quieren luchar por sus derechos e intereses particulares, muy bien, háganlo, pero no nos utilicen como ciudadanía, llenándose sus discursos con la frase: "por el bien de Chile", porque sabemos que no es así. Después de habernos dado la espalda a la ciudadanía todos estos años, en que podrían haber logrado tantos avances, ya no creemos en sus falsas proclamas, no insistan por favor.