Con una misa de consagración celebrada por el obispo de Iquique, Marco Antonio Órdenes, fue entregada a la comunidad la Iglesia de San Andrés de Pica, patrimonio cultural que resultó dañado con el terremoto de 2005.
En el frontis de la iglesia y contando con la presencia de autoridades regionales y comunales se llevó a cabo la ceremonia de entrega del templo a la comunidad, dando término al proceso de restauración que patrocinó y financió Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi a través de la ley de donaciones culturales.
Miles de devotos de San Andrés llegaron hasta el frontis de la iglesia para acompañar en la santa misa de la dedicación del templo.
La iglesia San Andrés de Pica resultó dañada con el terremoto del 2005, situación que se agudizó con los movimientos telúricos posteriores que llevaron a solicitar una restauración para dar seguridad a los feligreses.
Los trabajos realizados en Pica se suman a la reconstrucción patrocinada y financiada por Collahuasi a las iglesias de San Antonio de Matilla y San Lorenzo de Tarapacá, y a la que muy pronto se incluirá Huatacondo, templo que hoy está en proceso de restauración.
Los graves daños causados por el terremoto y posteriores sismos sobre la infraestructura y patrimonio de la región motivaron a Collahuasi a participar activamente en la restauración.
Giancarlo Bruno Lagomarsino, presidente ejecutivo de Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi, manifestó que “la comunidad de Pica puede contar desde hoy con su templo, al cual le realizaron diferentes trabajos de reforzamiento estructural y restauración de infraestructura, mediante los cuales se pone en valor al monumento como reflejo y símbolo de la historia del pueblo”.
Recordó que en a fines del 2009 se firmó el convenio de restauración, “ y hoy, tras soñar, planificar y materalizar la esperada restauración de la Iglesia de San Andrés de Pica, podemos celebrar el haber rescatado este templo que reviste importancia histórica, cultural y religiosa, además de agregar valor turístico a la localidad de Pica”.
El presidente ejecutivo de Collahuasi también agradeció al Obispado de Iquique, Gobierno Regional, Municipalidad de Pica, Fundación Jofré, Consejo de Monumentos Nacionales y al Comité Ley de Donaciones Culturales, por apoyar desde el comienzo la iniciativa que representa la idiosincrasia de la comunidad y de los habitantes de la región, por lo que era necesario restituirla.
La ceremonia contempló la entrega de llaves de parte de la compañía al Obispo de Iquique, quien posteriormente las entregó a la comunidad de Pica. Previo a ello fue descubierta la placa dedicatoria ubicada en el frontis de la iglesia.
En la oportunidad el representante del Consejo de Monumentos Nacionales, Oscar Acuña, dijo que la región de Tarapacá, a través de la reconstrucción y reparación de iglesias, es una muestra de que la recuperación del patrimonio es posible. “La iglesia es un bien vital para la comunidad porque presta un servicio social y es de incalculable valor para el país”
El alcalde de Pica, Iván Infante destacó el trabajo realizado en la iglesia, señalando que se trata de un patrimonio cultural de gran importancia para su comuna. Agradeció a la compañía minera por el aporte efectuado que permitió que su comuna recuperara su templo.
En tanto la intendenta Luz Ebensperger valoró el esfuerzo efectuado por Collahuasi, el Obispado y la comunidad, por sacar adelante la restauración. Asimismo afirmó que el gobierno trabajará hasta reconstruir todas y cada una de las iglesias dañadas con el terremoto de 2005.
El Obispo de la Diócesis de Iquique resaltó la labor de la comunidad de Pica, de la comunidad religiosa de Santa Marta por llevar adelante el trabajo pastoral, a la compañía minera por hacer posible la restauración y al alcalde de Pica por respaldar el permanente apoyo.
Sobre la Iglesia de San Andrés de Pica
La Iglesia de San Andrés de Pica fue construida entre 1880 y 1886, corresponde a la tercera construida en la comuna.
En la fachada principal destacan las dos torres de planta cuadrada en ambos lados del frontis donde alojan las campanas. El interior de la iglesia tiene tres naves paralelas.
Los trabajos realizados, que demandaron un costo de 402 millones de pesos, incorporó intervenciones de reforzamiento estructural que consistieron en la incorporación de contrafuertes en muros laterales y muro de contención, estabilización vigas celosías nave central y reforzamiento estructural techumbre.