La Teletón ya está anunciando su nueva versión televisiva y nos va a encontrar en un estado anímico diferente en relación a otros años.
Hoy se sufre más que ayer, con las experiencias terribles que viven algunos seres humanos que han llegado al mundo sin conocer otra realidad que la que el destino les ha dado y se siente una angustia que aprieta el corazón, y hace que las lágrimas asomen fugazmente para decirle a nuestro rostro que no demuestre sufrimiento porque hay otros que aún en su incapacidad son más felices que los que nos creemos normales.
Es de justicia humana y divina reconocer el esfuerzo desplegado por “Don Francisco” durante tanto tiempo para aglutinar en cada campaña a toda una población que vibra en estas 27 hors de amor.
Viene a mi memoria una etapa de mi vida en que el trabajo en la escuela como docente, era hacer cantar a los niños y en una de esas ocasiones con el coro del colegio, optamos por unir nuestras voces con los niños discapacitados y componer alegres armonías que finalmente se traducirían en canciones de esperanza y optamos por llevar nuestras canciones al Centro de la Teletón, que recién iniciaba sus actividades en el sector de Estación Central, donde aún se encuentra y a decir verdad, se nos apretó la garganta de emoción al ver a tantos pequeños tratando de sobreponerse a sus dificultades físicas, que simplemente no pudimos cumplir nuestro objetivo y salimos de regreso con el corazón apretado a pesar de la alegría que se vivía adentro y el cariño de los profesionales.
Ahora con los adelantos de las comunicaciones y los progresos tecnológicos, algunos casos son mostrados como ejemplos de esfuerzo y superación y se ha logrado formar conciencia ciudadana para apoyar esta noble iniciativa que ha salido adelante con la fe de muchas personas que aportan ideas, entregan trabajo y logran dibujar a lo largo y ancho del país un corazón bien grande y generoso que no permite egoísmos, ni diferencias de ninguna especie.
No se justifica que este encuentro con la solidaridad, se vea afectada debido a los resultados y apasionamientos que produce una elección de alcaldes y concejales y luego por las elecciones de parlamentarios y presidencial del próximo año.
No me parece lógico, ni adecuado que por razones coyunturales, los niños sufran un deterioro en su desarrollo físico y cognitivo, cuando lo que más se necesita es aglutinar cada día a más corazones que mantengan viva la esperanza del espíritu solidario, que caracteriza a todos los chilenos en causas nobles como la Teletón.
Foto: juque
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